Cómo elegir una bomba o inflador para tu mountain bike

En las siguientes líneas te explicamos cómo elegir una bomba o inflador para tu mountain bike. Hay muchos tipos de bombas, pero nos centraremos principalmente en las dos clases más comunes. La primera sería una bomba de suelo o de pié, la cual usaremos para uso doméstico. Por otro lado tenemos la que todo ciclista debe llevar en su maillot cuando sale en bici, la cual llamamos bomba o inflador de mano.

 

Qué bomba o inflador tener para tu Mountain Bike

Si puedes permitírtelo, la opción más acertada es tener las dos bombas, porque aunque el resultado que ofrecen puede parecer el mismo, lo cierto es que cada una tiene su función.

Si bien es cierto que tanto una como otra al final serán necesarias en nuestra vida como ciclista ya seas amateur, aficionado o ciclista ocasional.

También dependiendo de la modalidad de ciclismo que practiques necesitarás algunas prestaciones u otras que te contaremos más adelante en este artículo.

Bomba o inflador de suelo

Estas son del primer tipo, es decir aquellas bombas o infladores que podemos tener en casa.

Hay muchos tipos, pero para nuestra mountain bike y en caso de tener una bicicleta de ruta también, lo mejor es un inflador con manómetro que incluya una manguera para no ocasionar ningún daño a la válvula. Esta bomba mete mucho más presión a la rueda que la bomba de mano, pero evidentemente ocupa demasiado espacio como para poder llevarla de ruta.

Dependiendo tu modalidad como te deciamos antes, necesitarás algunas prestaciones, por ejemplo: si solo practicas Mountain Bike con una bomba de pié estandar tienes suficiente, pero si en cambio tambien alternas entre Mountain Bike y ciclismo de ruta, necesitarás una bomba que al menos meta la 8 o 9 kg de presión puesto que lo vas a necesitar para tu bici de ruta.

Recuerda que las bombas de suelo suelen traer en la boquilla, o bien un adaptador para válvulas de 6´2 mm (presta) o de 8´3 mm (schrader), algunas traen también las dos medidas, lo que las hacen mucho mas practicas a la hora de utilizarla tanto con unas válvulas como con otras.

Bomba o inflador de mano

Si aún no tienes un inflador de mano debes hacerte con uno cuanto antes, en una salida te puede sacar de un buen apuro.

Obviamente si pinchamos durante nuestras salidas tendremos que hacer uso obligatorio de él, pero además, puede servirnos en caso de que queramos variar la presión de nuestras ruedas en ruta, o si tenemos algún pequeño pinchazo y hay que ponerle un poco más de presión al neumático.

Al igual que con el inflador de pie, recomendamos una bomba que meta la presión suficiente y se adapte a tus necesidades.

Con este tipo de inflador si no tenemos cuidado, es más probable que tengamos problemas con la válvula a largo plazo, al utilizarlo, nuestra válvula sufre ligeramente un balanceo tanto al enchufar la boquilla como al ejercer presión para meter aire. Ten cuidado con la presión que lo usas para no terminar rompiendo la válvula de la rueda y quedarte bien sin poder salir :(, o bien tirado en medio de la ruta.

Recuerda que la mayoría de las bombas tienen la particularidad de que invirtiendo el mecanismo interno de la bomba podemos llenar lo mismo una cámara de 6´2 mm como una de 8´3 mm.