3T entra de lleno en el e-gravel con una nueva gama eléctrica fabricada en Italia

Con el mercado del gravel ya completamente dominado, ahora 3T renueva su gama de bicis eléctricas con tres modelos, homólogos a sus equivalentes musculares, que al igual que sus afamadas gravel también serán fabricadas al 100% en Italia partiendo del hilo de carbono que tejen acorde a sus necesidades para elaborar las distintas láminas de carbono que componen sus cuadros.

3T transforma sus bicis de gravel musculares en e-bikes

3T continúa ampliando la capacidad de sus instalaciones de Presezzo, localidad cercana a Bérgamo donde la firma italiana ha ido trasladando prácticamente la totalidad de su producción, tanto bicis como componentes, consiguiendo un control total sobre el procedimiento de elaboración de sus piezas de fibra de carbono.

Al igual que ocurre con sus bicicletas de gravel musculares, 3T contará con tres modelos eléctricos que únicamente añaden la E a su denominación, es decir, eRacemax, eUltra y eExtrema. La eRacemax, derivada de una de las bicis de gravel más aerodinámicas y rápidas del mercado y pensada para quienes buscan la máxima deportividad.

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Por su parte, la eUltra es la opción intermedia, una gravel aventurera con una posición de conducción más cómoda y pensada para un gravel polivalente, desde a aquellos que les gusta rodar rápido a quienes afrontan viajes de bike packing o incluso para aquellos que encuentran en una bici de gravel la opción perfecta para sus desplazamientos urbanos.

En el extremo más radical, como su nombre indica, la eExtrema es prácticamente una MTB. Una gravel diseñada para alojar neumáticos de gran balón y totalmente capaz de enfrentarse a los terrenos más técnicos y accidentados.

El cuadro en todas ellas es prácticamente el mismo que en sus homónimas musculares ya que las grandes secciones de tubo diagonal que ya de por sí incluían estas bicis permiten alojar la batería del sistema de asistencia eléctrica de forma bastante sencilla. Una asistencia que se deja en manos de un motor Mahle X-20 que la marca ha personalizado en su respuesta según los requerimientos de 3T.

Como es habitual en las bicicletas que equipan motor Mahle, el sistema se controla mediante un pulsador colocado en el tubo horizontal que, además de encender y apagar el sistema eléctrico permite alternar entre los distintos modos de asistencia. Aparte, cuenta con conectividad Bluetooth para poder personalizar los distintos modos a través de su app y la capacidad de conectarlo a nuestro ciclocomputador Garmin.

Con su 65 Nm de par, el motor Mahle X-20 está tarado para ofrecer una entrega de potencia progresiva y fluida ademas de que, su ubicación en el buje trasero hace que pase completamente desapercibido, sin añadir rozamiento, cuando la asistencia no trabaja. Se acompaña de una batería de 350 Wh que, en un recorrido de unos 2.000 m de desnivel, con un ciclista de 75 kg permitiría una autonomía de hasta 150 km.

En esta puesta de largo, 3T cuenta con dos montajes para cada uno de los modelos. La eRacemax la podremos encontrar en una opción más asequible basada en Rival, con un precio de 9.916 € y en un espectacular tope de gama con SRAM Red XPLR AXS, ruedas 3T Discus y las espectaculares bielas 3T Torno que asciende hasta los 12.762 €.

Por su parte, la eXtrema también tiene dos montajes idénticos a los dos de la eRacemax y, de hecho, los precios de ambos montajes son exactamente los mismos que para la bici más deportiva. Por último, la eUltra se presenta como una opción más accesible con un montaje basado en SRAM Rival XPLR AXS que tiene un precio de 6.794 € con la curiosidad de que está opción cuenta con un manillar plano tipo MTB. Por último se reserva un rincón para quienes prefieren grupo Shimano con un equipamiento con grupo GRX que se queda en 5.354 €.