Se anuncian bajadas importantes de precio en las bicicletas ¿llega el efecto kétchup?

A principios del año 2022 conocíamos un particular término económico denominado 'efecto ketchup', y lo hacíamos para intentar entender qué pasaría con la subida de precios que estábamos viviendo en el sector ciclista. Ahora, algunas marcas comienzan a bajar los precios de sus catálogos de manera general y parece que se debe, con muchos matices, al efecto rebote que proponía la teoría del bote de ketchup.

El efecto ketchup, la bajada del precio de las bicicletas y la nueva normalidad en el sector ciclista

En los últimos años vimos como el precio de las bicicletas subía casi cada temporada, ahora, a diferencia de las dos últimas, se comienzan a anunciar bajadas de precio directamente por parte de los fabricantes.

Por ejemplo, Cannondale acaba de comunicar una rebaja general de todo su catálogo y en modelos específicos, como la Scalpel Hi Mod 1, la rebaja es de hasta 2.000€. Y lo mismo sucede con Specialized, por ejemplo su modelo Epic EVO Pro tiene un descuento actual en la web de la marca de 2.100€, y el fabricante lleva anunciando ofertas directas en su web desde la Navidad de 2022, tanto a bicicletas como a todos su equipamiento y componentes. 

Como decimos esta bajada de precios viene directa desde los fabricantes, pero las tiendas por su parte hace tiempo que también aplican descuentos en el precio final para intentar darle salida al stock en tienda y poder cumplir con las programaciones de las marcas.

Ahora bien, lo difícil llega cuando intentamos entender a qué se debe esta bajada de precios tan agresiva. Volviendo a la 'teoría del ketchup', en 2022 explicábamos que algunos economista preveían que habría un efecto rebote, como cuando agitas mucho un bote de ketchup para que salga y al final sale todo de golpe, y lo hacíamos así: "Una vez que la distribución se normalice, quizá ya a finales de año, o tal vez en 2023, la oferta se dispararía de manera repentina, y las bicicletas llegarían por miles a las tiendas."

Pero para ser justos, parece que tampoco estamos viviendo este efecto de manera estricta y se trata de una transición gradual hacia lo que podríamos denominar como una nueva normalidad en el sector.

Junto con la rebaja de precios y stock inmediato de algunos modelos de bicicletas, sigue conviviendo la escasez y tiempos de espera infinitos de otros tantos modelos y componentes. Y para intentar solventar este problema a largo plazo algunas marcas siguen con los problemas logísticos de Asia mientras que se encuentran sumergidos en cambios estructurales que acorten la cadena de distribución. Por ejemplo, Orbea ha creado una marca de ruedas premium propia, Oquo, cuya producción se realiza directamente en el País Vasco. Y el grupo PON, donde se encuentra Cannondale, Santa Cruz, Cervelo, etc, está creando megacentros de producción en Europa que le permitan no depender 100% de Asia.

Todo este nuevo movimiento de precios parece atender a una normalización del mercado y coincide que las marcas que están bajando el precio de las bicicletas fueron las que primero subieron sus tarifas en 2020 y 2021, así que se podría esperar que el resto de fabricantes sigan esta nueva trayectoria y también ajusten sus precios en los próximos meses. Pero, una vez que el precio se ajuste a la baja ¿qué pasará si cuando los fabricantes comiencen su producción fuera de Asia con el consiguiente aumento de costes?