Al detalle las bicis de Vingegaard para ganar el Tour de Francia

Cervélo vuelve a triunfar en el Tour de Francia gracias al ciclista de Jumbo-Visma Jonas Vingegaard. Al contrario que en otras escuadras, los ciclistas del equipo neerlandés tienen a su disposición modelo de bici escaladora, aerodinámica y, por supuesto, la máquina de contrarreloj con la que Vingegaard asestó el golpe definitivo a la carrera.

Las Cervélo de Jumbo-Visma. Máquinas ganadoras

Ganar el Tour de Francia es para una marca de bicis de carretera la máxima aspiración. Que se lo digan si no a Pinarello, que durante décadas ha sido dominadora del palmarés de la carrera y hoy sus bicis tienen ese aura de objeto de culto y producto de lujo, un estatus que va más allá del de simple bici.

Cervélo también se puede encuadrar entre esas bicis con un aura icónico, algo que no viene de ahora ya que, no olvidemos, que Carlos Sastre ganó su Tour de Francia a lomos de una de sus máquinas. Sin embargo la repercusión mediática en el mundo de la comunicación actual es mucho mayor y las dos victorias consecutivas de Jonas Vingegaard han colocado a sus bicis en el primerísimo nivel.

Jonas Vingegaard, como es habitual en el Jumbo-Visma, ha alternado entre la escaladora R5 y la aerodinámica S5 en función del trazado de la etapa del día. Algo que no suele ser habitual entre los corredores profesionales, habituados a una misma bici y que no suelen variar de modelo pese a que la marca suministradora disponga de varias opciones. Un claro ejemplo lo podemos encontrar en Mathieu van der Poel al que siempre vemos a lomos de una Canyon Aeroad.

La principal novedad que presentan las bicis de Vingegaard en este Tour respecto al del año pasado es la presencia del grupo SRAM Red AXS tras el contrato suscrito entre la marca y el equipo a finales del año pasado. Esto nos ha permitido ver como Jonas Vingegaard equipaba la aerodinámica S5, renovada el año pasado para aprovechar las nuevas normas UCI referentes a los perfiles aero, con una configuración monoplato a fin de mejorar esa penetración al viento, ahorrando unos valiosos vatios además de servirle para reducir el peso de la bici.

Jonas ha utilizado la S5 en las etapas llanas, pero también en jornadas quebradas como las disputadas al inicio de la carrera en el País Vasco con unos desarrollos acordes al terreno como ya os explicábamos en este artículo. Como curiosidad, mencionar que la bici de Vingegaard ha equipado las nuevas manetas SRAM Force en vez de las Red del resto del grupo. La razón hay que buscarla en su nueva ergonomía, más compactas que las actuales del grupo tope de gama.

Especial mención a la S5 que el danés usó en la última etapa en los Campos Elíseos que, como resulta habitual, lucía una decoración especial, con el amarillo como protagonista, para festejar su segundo Tour de Francia.

En las etapas de montaña la opción ligera R5 ha ganado la partida montando una configuración tradicional de doble plato. Una bici que además de ligereza cuenta con un extra de rigidez para aportar la máxima capacidad de respuesta en los duros cambios de ritmo a los que tuvo que enfrentarse cada vez que Tadej Pogacar trataba de seleccionar la prueba. En cualquier caso, el montaje de ambas bicis es similar, tan sólo diferenciándose en la mencionada combinación de platos, el cockpit específico de la S5 que en la R5 es sustituido por un FSA Metron 5D y las ruedas Reserve de menor perfil en la bici escaladora.

Por último, merece una mención especial la P5 de crono, sin duda el estandarte de Cervélo desde que comenzó a hacerse un nombre en el mundo del triatlón y que la marca sigue mimando para mantenerla como una de las mejores cabras del mercado.

Aquí llama la atención los espectaculares perfiles de sus ruedas Reserve, lenticular en la parte trasera y con 77 mm de perfil la delantera que ayudan a maximizar las propiedades aerodinámicas de su cuadro. A diferencia que en sus hermanas de carretera, las cubiertas elegidas son la versión específica para contrarreloj Vittoria Corsa Speed, en todo caso, también en configuración tubeless en los tres casos, en medida de 700x28c, la que parece ser el nuevo estándar en el pelotón.