7 cambios que haríamos en una MTB nueva

Acabas de comprar tu mountain bike nueva, o estás pensando en hacerlo próximamente, y crees que llegará a tus manos perfectamente configurada. ¿En serio? Olvídalo, es lógico que elijas una talla correcta en una mountain bike nueva, incluso que la ajustes o te la ajusten en el punto de venta, pero considera que cada ciclista es un mundo y hay ciertas configuraciones, ciertos ajustes en cualquier mountain bike nueva, que deberás hacer más pronto que tarde. Aquí tienes 7.

7 ajustes para tu mountain bike nueva

1. En primer lugar, revisa tus puños. Vas a notar que el tacto, la sensación que transmiten los puños de tu mountain bike nueva es distinta, porque progresivamente los puños también se han ido adaptando o porque cada marca monta sus propios puños. El caso es que siempre cuesta un poco adaptarse al agarre de una mountain bike nueva, así que si notas que no te van del todo bien, ¿por qué no pruebas a poner tus puños de siempre? Será un pequeño cambio, mucho menos traumático, que no sumen a todo lo distinto que trae tu mountain bike nueva. Así que cambia los puños por los tuyos de siempre, eso sí, si tus puños estaban en buen estado, porque si necesitaban una jubilación, deshecha esta idea.
   
   
   
   
2. Los pedales son otro punto muy sensible en cualquier mountain bike nueva. Normalmente, las ventas de bicis se hacen sin pedales por esta razón, para que el pedal y la cala que ya tienes te sirvan. Sin embargo, muchas mountain bike nuevas vienen con pedales. Así que te toca desmontar y montar tus pedales de siempre. Es un proceso bastante sencillo, no tiene mucha dificultad sustituir unos pedales. Así que hazlo y te sentirás más cómodo.
   
   
   
   
3. Aquí va uno que nos agradecerás eternamente: tubeliza tus ruedas. Quizá tu mountain bike nueva ya incorpore ruedas tubelizadas, pero si no es así tubelízalas o solicítalo al punto de venta para que lo haga y ya la recibas tubelizada. Es algo que no cuesta demasiado y te va a solucionar muchos calentamientos de cabeza en tus salidas. Te evitará más de un susto, seguro, así que tubeliza tu mountain bike nueva.
   
   
   
   
4. Cambia los neumáticos. Sí, sabemos que puede sonar más controvertido: ¿si mi mountain bike nueva trae por consiguiente gomas nuevas, por qué debo sustituirlas? A ver cómo decimos esto sin herir sensibilidades: digamos que una mountain bike nueva monta cubiertas poco resistentes, o menos resistentes, para que el conjunto quede visible y sobre todo pese menos. Pero seguro que hay neumáticos mejores, además de que esto te permitirá elegir tu medida preferida de balón y el tipo de cubierta que mejor se adapte a tus salidas y a tu perfil como ciclista. Si quieres, deja las de serie hasta que se gasten; o al sustituirlas guárdalas para una futura emergencia. Pero piensa en poner mejores gomas.
   
   
   
   
5. Una mountain bike nueva es una sensación preciosa. Pero algo recurrente es, tras la primera salida, arañarla y sentirte un poco mal. Sí, es algo idiota, porque con el tiempo es inevitable que sufra arañazos, roces, etcétera, si de verdad le das camino a tu mountain bike nueva. Pero el primer arañazo es como el primer desamor: siempre duele un poco más. Así que puedes poner protecciones al cuadro, en sus zonas más sensibles y expuestas, antes de la primera salida. Te ahorrarás arañazos al cuadro y a la horquilla, al menos los más gruesos y los primeros, y es algo barato.
   
   
   
   
6. Hay una pieza en tu mountain bike nueva que es sin duda la que más puede corregir tu postura encima de la bici. Hablamos de la potencia. Si haces un estudio biomecánico y descubres que tu postura no se acaba de adaptar a pesar de que la mountain bike nueva que acabas de comprar es tu talla, la potencia es un elemento que, con cambiar una sola pieza, más modifica la geometría de la bici y la posición del ciclista.
   
   
   
   
7. Por último, y esto te va a doler un poco, puedes cortar el manillar. Sí, parece criminal decir que a una mountain bike nueva puedes cortarle el manillar, imagina si es de carbono. Pero si ya has tenido una bici con el mismo tamaño de rueda, sabrás qué longitud de manillar te va mejor basándote en tu experiencia previa. Así que ¿por qué no hacer de tu nuevo manillar un manillar cómodo en su tamaño y adaptado a tu experiencia de años?

Rodar con una mountain bike nueva

La primera vez que montas en una mountain bike nueva, las sensaciones son únicas. Es difícil describir a alguien que no ha tenido la oportunidad cómo puedes sentirte. Da igual que fueses un niño, que hayan pasado 30 años o que aquella mountain bike nueva fuese un trozo de hierro: es algo inolvidable.

En cualquier caso, con el paso de los años, aprendes a conocerte mejor como ciclista, a acomodarte mejor sobre una bici. Y viene el segundo duelo: cambiar de bici, y aquí lo que preocupa es cómo te vas a adaptar a una mountain bike nueva cuando ya estabas hecho a la tuya. Pero no te preocupes, con estos trucos y un poco de tiempo, seguro que en meses ya sólo te acordarás de tu otra bici, la antigua, para decir que la querías pero que era tremendamente incómoda.