El Giro de Italia 2024 podría ser histórico

Carretera 13/05/24 16:27 Sergio P.

Como era previsible, Tadej Pogacar ha arrancado el Giro de Italia 2024 arrasando allá por donde pasaba. Todo ello con el objetivo de lograr amarrar cuanto antes la clasificación general de esta edición de la Corsa Rosa y con un ojo pensando en guardar las máximas fuerzas posibles de cara al Tour de Francia en su durísimo reto de lograr conquistar en el mismo año Giro de Italia y Tour de Francia, hazaña que ningún ciclista es capaz de lograr desde que lo hiciera Marco Pantani en 1998.

Tadej Pogacar busca hacer historia. El Giro de Italia 2024 es el primer paso para lograrlo.

Llegamos a la primera jornada de descanso del Giro de Italia 2024 y es el momento de reflexionar acerca de lo acaecido durante estas primeras 9 etapas de la carrera tras las que el titular no puede ser otro que Tadej Pocagar hace buenos todos los pronósticos. De hecho, lo que es de extrañar son las voces que están criticando al esloveno por su “exceso de competitividad” a colación de verle pelear en prácticamente todas las jornadas que llevamos disputadas.

Y es que no nos podemos olvidar que, con poco más de un tercio de la carrera disputada, Tadej Pogacar ya atesora 3 triunfos parciales en su haber, pudiendo haber conseguido un cuarto en 9 de cada 10 veces que viviéramos un desenlace como el de la etapa que abría el Giro de Italia 2024 en las calles de Turín.

Tadej Pogacar no esperó lo más mínimo para empezar a marcar territorio y apenas le bastó un duro repecho próximo a meta para destrozar la carrera. Una ofensiva a la que sólo Jonathan Narváez, a la postre vencedor de ese primer parcial, y Max Schachmann pudieron responder. No dejó cabos sueltos al día siguiente en la subida a Oropa y, emulando a Marco Pantani, Pogacar venció con contundencia haciendo que quienes trataron de responder a su ataque, véase Ben O’Connor, acabara pagándolo caro.

Ni siquiera en la tercera etapa se estuvo quieto el esloveno y, aprovechando un ataque en un repecho en los últimos kilómetros, Pogacar volvía a dejarse ver y muy cerca estuvo de haberse hecho con la etapa. En este caso, fue Geraint Thomas el único capaz de responder no sin ciertas dificultades.

Sucedieron a la carrera un par de jornadas, ahora sí, tranquilas como previo a la jornada del jueves con sus tres tramos de Sterrato. Sin embargo, no vivimos excesiva batalla entre los favoritos, los cuales tenían la cabeza puesta en la decisiva crono del día siguiente.

No fue para menos ya que la organización del Giro de Italia 2024 había planteado una crono tremendamente dura. Nada menos que 40 kilómetros, cifra que parece de otros tiempos y que obligó a los ciclistas a cerca de una hora de esfuerzo al máximo con el aliciente de tener una configuración muy parecida a la que el año pasado sirvió a Jonas Vingegaard para sentenciar el Tour de Francia: primera parte totalmente llana y los 6 últimos kilómetros en ascenso.

Mostró Pogacar todo su poderío no sólo metiendo tiempo a sus rivales por la general sino también venciendo la etapa frente a Filippo Ganna, el máximo favorito para el triunfo en lo que era casi su principal objetivo en este Giro de Italia 2024.

Al día siguiente, camino de Prati di Tivo, el segundo final en alto y primera verdera etapa de montaña vimos sin embargo a un Tadej Pogacar mucho más conservador y, de hecho, la tónica fue la casi total falta de movimientos de los favoritos, seguramente en modo recuperación tras la dura crono del día anterior. En ese escenario, a Pogacar le bastó con poner a su equipo a controlar la carrera y lucir su explosividad en las llegadas para apuntarse un nuevo triunfo de etapa.

Se podría pensar, a la vista de la tremenda superioridad que ha mostrado Tadej Pogacar que tiene el Giro de Italia 2024 ganado y que con únicamente defenderse la bastará para llegar a Roma de rosa. Pero el Giro es una carrera engañosa y no sería la primera vez que un ciclista parece imbatible y, en un mal día, pierde todas sus opciones a la victoria. Sin ir más lejos, nos viene a la cabeza Simon Yates en el año 2018 cuando un espectacular Chris Froome le robó el rosa en las postrimerías de la carrera.

La diferencia radica en que, si miramos el Top10 tras esta primera semana del Giro, no parece haber un ciclista con nivel suficiente para poner en jaque al esloveno en un cara a cara y menos con las diferencias que ya a estas alturas se manejan en la clasificación general, con el segundo a más de dos minutos y medio y cuando, mañana mismo, tendremos otro nuevo final en alto que debería favorecer a Tadej Pogacar y la semana concluirá con una nueva contrarreloj y el pelotón adentrándose en los Alpes camino de Livigno.

Parece claro que Tadej Pogacar quiere dejar sentenciado el Giro de Italia cuanto antes y, por lo visto en la etapa del sábado, dedicarse a ahorrar fuerzas pensando ya en el Tour de Francia. No olvidemos que si bien el Giro de Italia es un objetivo en sí mismo, el gran reto es conseguir el doblete Giro-Tour, algo que muy pocos ciclistas pueden presumir de tener en su haber, menos aún en los tiempos actuales en los que parece una quimera dada la exigencia y el nivel del ciclismo actual.

Incluso alguna voz ha hablado de que, en caso de lograr el doblete, pudiera plantearse competir también en La Vuelta, aunque más bien parece una afirmación de barra de bar que una posibilidad real, precisamente por lo que mencionábamos de las exigencias del ciclismo actual y la aparente imposibilidad de que un ciclista afronte una preparación anual con tres picos de forma.

 

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