Habrá motor Porsche en 2026, pero no e-bikes de la marca

El desembarco definitivo de Porsche en el mundo de las e-bikes acaba de sufrir un giro importante. La marca alemana y el grupo neerlandés PON Holdings (propietario de Cannondale, Focus, Cervelo, Santa Cruz...) han decidido poner fin de forma abrupta al desarrollo de bicicletas eléctricas bajo la marca Porsche dentro de su empresa conjunta P2 eBike GmbH, uno de los proyectos más ambiciosos del segmento premium de los últimos años.

Porsche frena su ambicioso proyecto de e-bikes… pero mantiene viva su ofensiva en motores eléctricos

La sociedad, creada a comienzos de 2022 y con sede en Stuttgart, tenía como objetivo diseñar, ensamblar y comercializar e-bikes y pedelecs de alta gama con sello Porsche para el mercado internacional. En su momento llegó a reunir a una docena de trabajadores y trabajaba en modelos tan estratégicos como una e-MTB completamente desarrollada desde cero, que debía estrenar el futuro sistema de asistencia Porsche E-Bike Performance.

La cancelación del proyecto ha sorprendido incluso a personas vinculadas directamente a la empresa. Durante los primeros meses de 2025, P2 eBike había reforzado su estructura, incorporando perfiles de marketing y nombrando en abril a Gudrun Scharler como nueva directora. Apenas unos meses después, Porsche y PON decidieron desconectar el proyecto.

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Ambas compañías se han limitado a una escueta declaración conjunta en la que aseguran que la decisión responde a una revisión estratégica para concentrarse en proyectos alineados con los objetivos a largo plazo.

El adiós a P2 eBike no se produce en el vacío. El movimiento encaja con el contexto actual de la industria ciclista, marcada por un claro enfriamiento tras el boom vivido durante y después de la pandemia. El exceso de stock, la contención del consumo y el aumento de los costes están llevando a muchas empresas, especialmente a actores externos al ciclismo tradicional, a replantearse inversiones que hace solo dos o tres años parecían incuestionables.

En ese escenario, el segmento premium de e-bikes, uno de los más atractivos para marcas procedentes del automóvil, está siendo especialmente revisado.

Porsche no fabricará e-bikes… pero sí motores para bicis

Eso sí, el cierre de P2 eBike GmbH no supone la retirada total de Porsche del mundo de la bicicleta eléctrica. Desde Porsche E-Bike Performance, la otra empresa conjunta creada junto a PON y con sede en Ottobrunn, se han apresurado a aclarar que su actividad continúa sin cambios.

Según la compañía, el desarrollo de su sistema de asistencia eléctrica propio sigue adelante y la presentación del motor Porsche está prevista para 2026, tal y como se había planificado inicialmente. El proyecto mantiene plena autonomía y su objetivo es convertirse en proveedor de sistemas de propulsión para otros fabricantes, además de convivir con los actuales motores Fazua, marca que Porsche adquirió en 2022.

Conviene recordar que la estrategia original pasaba por una clara división de funciones en la que P2 eBike debía fabricar las bicicletas Porsche, mientras que Porsche E-Bike Performance desarrollaría los motores que las impulsarían. Con la desaparición del primer pilar, Porsche redefine su presencia en el sector, apostando únicamente por la tecnología.

No es la primera vez que Porsche ajusta su rumbo en este terreno. En el pasado ya comercializó e-MTB basadas en modelos de Rotwild, colaboró con firmas como Storck y participó en proyectos como Greyp o Cyklær, muchos de ellos finalmente cancelados o absorbidos. Incluso tras la compra total de Fazua y Greyp, algunas de esas iniciativas acabaron desapareciendo.

Ahora, con P2 fuera de juego y sin que ningún modelo haya llegado a presentarse públicamente, Porsche parece optar por una estrategia más contenida al abandonar la fabricación de bicicletas completas y centrarse en lo que mejor sabe hacer, ingeniería y sistemas de alto rendimiento.