Hemos probado la Orbea Rise 2025 y va directa a nuestra lista de favoritas

La Orbea Rise fue una de las primeras eBikes ligeras que aparecieron en el mercado y ha sido una de las que más hemos recomendado desde su aparición. Se trata una mountain bike con lo mejor de los dos mundos y ahora se acaba de actualizar para seguir mejorando. Orbea nos invitó a la presentación internacional de esta Rise 2025 y la hemos podido probar a fondo en los exigentes senderos de Aínsa, uno de los lugares de referencia en el Enduro nacional.

Orbea Rise 2025: la eBike ligera más capaz del mercado

El camino que elige Orbea para su bici eléctrica de referencia es bastante ambicioso. En el desarrollo de la Rise no se ha optado por el montaje de un motor ultraligero y asumir que una eBike ligera tiene una capacidad limitada. En Orbea han apostado por tenerlo todo.

El concepto principal de la Rise se basa en una colaboración de Orbea con Shimano para customizar su motor EP801 mediante la adición de un firmware específico para obtener el comportamiento deseado para esta bici. Ya lo hicieron en la Rise anterior y desarrollaron el motor Shimano EP801-RS. Un motor específico para esta bici donde se buscaba una asistencia mucho más natural, limitado a 54Nm, y una optimización de batería para que la asistencia no sea un problema.

En esta nueva versión se ha dado una vuelta de tuerca y han conseguido mejorar el firmware para, con esa misma sensación de pedaleo natural, llegar hasta una asistencia máxima de 85Nm.

El nuevo motor se denomina EP801-RS GEN2 eMTB optimized, y tiene esa misma asistencia natural y una gran optimización de la batería, como hemos podido comprobar y os contaremos a continuación. 

Ahora, en la aplicación Shimano eTube, podemos elegir entre dos perfiles antes de salir a rodar. Por un lado el perfil RS, similar al de la versión previa de la Rise, y por otro lado el perfil RS+, el cual es la gran novedad de este sistema y nos aportará un extra de asistencia para esos momentos donde hay que apretar fuerte, incluso a cadencias bajas.

Ambos perfiles seguirán siendo totalmente personalizables según nuestras preferencias.

Como ya hemos dicho, el motor Shimano EP801-RS GEN2 optimiza al máximo el consumo de batería, de modo que una batería relativamente pequeña aporta una gran autonomía. Aun así, hay dos tamaños disponibles de batería para la nueva Rise, con más capacidad que en la versión anterior, ya que la pequeña aporta 420Wh y la grande 630Wh.

Mucho más que una eléctrica

Lo que en Orbea han querido poner por delante de todo es el funcionamiento de la bici en el terreno. Para ello han rediseñado el cuadro y, entre otras cosas, han mejorado aspectos como la rigidez, pero allá donde se necesita. 

Han tenido en cuenta el valor de la rigidez a lo largo del cuadro para tener un equilibrio. El resultado es un aumento de rigidez en el triángulo delantero del 8% respecto a la Rise anterior y el mejora en un 14%.

Asimismo, la rigidez de cada cuadro se optimiza en función de la talla, para que todos los usuarios obtengan unas sensaciones y respuesta similares, sea cual sea su peso y tamaño.

La nueva Rise adopta ese brazo de refuerzo asimétrico que ya vimos en la Occam y que, como nos explicaron, tiene una incidencia bastante grande en ese tunning de rigidez del que hemos hablado, a costa de unos escasos 40g.

El sistema de suspensión se basa en un monopivote con un punto de giro concéntrico al eje trasero, dotándolo así de mayor sensibilidad e independencia respecto a la frenada. En esta versión se ha aumentado ligeramente la progresividad para mejorar la capacidad de absorción.

El peso total del cuadro se queda en 2,2kg en talla M sin amortiguador. Exactamente el mismo peso que la versión anterior.

Con la intención de optimizar el manejo de la bici lo máximo posible han ido un paso más allá en el concepto Steep and Deep, que no es otra cosa que maximizar la inserción de la tija para poder montar tijas con largo recorrido en todas las tallas. Esto en una eBike es un reto y han tenido que rediseñar detalles como el puerto de carga o el cable principal.

El resultado es una posible inserción de la tija hasta una distancia de tan solo 110mm del eje de pedalier, lo cual permite montar tijas con recorridos realmente largos.

Versiones SL y LT

Al igual que en el modelo Occam, la gama Rise se divide en dos versiones. La Rise SL está enfocada a un Trail algo más ligero, con 140mm de recorrido en ambas ruedas y teniendo algo más en cuenta el peso en su montaje. La versión Rise LT aporta 160mm de recorrido delante y 150mm en la trasera, viene con horquillas con barras de 36mm y un montaje para un uso más agresivo. 

El cuadro es el mismo en ambas, excepto el prolongador del amortiguador y el propio amortiguador. En la SL tenemos un prolongador de carbono y el la LT uno de aluminio con un chip de movimiento rápido para cambiar la geometría.

Orbea Rise 2025 LT M-TEAM

En la presentación que Orbea ofreció en Aínsa tuvimos contacto con ambas versiones de la nueva Rise, pero la bici que tuvimos a nuestra disposición para probar a fondo fue la versión LT, en concreto la tope de gama M-TEAM.

Esta bici ofrece un recorrido trasero de 150mm y 160mm delante y una geometría que maximiza las capacidades de esta bici gracias, entre otras cosas, a su chip de cambio de geometría instantáneo mediante la llave integrada en la palanca del eje trasero. En cuestión de segundos podemos cambiar ligeramente el carácter de la Orbea Rise LT.

En la dirección tenemos un lanzamiento de 64º o 64,5º según la posición elegida. El tubo vertical varía igualmente entre los 77º y 77,5º. El reach es de 455mm en posición Low y 460mm en posición High y la caída del pedalier varía entre 26 y 34mm.

En Orbea han hecho un gran esfuerzo de diseño para conseguir las vainas más cortas posibles y, con 440mm, han conseguido calcar la medida de la Occam, la cual se puede considerar su hermana sin motor, ya que prácticamente toda la geometría es idéntica en ambas bicis.

En cuanto al montaje de este modelo M-TEAM tenemos una horquilla Fox 36 Float Factory Kashima con el nuevo cartucho Grip X. En el amortiguador podemos elegir un Fox DHX Factory de muelle o, como nuestra bici de pruebas, un Fox Float X Factory. Este tipo de elecciones, como en gran parte del resto del montaje, se pueden hacer gracias al programa MyO de Orbea.

La transmisión se confía al grupo Shimano XT Di2, lo cual nos va a dar un plus de funcionamiento con su sistema Free Shift.

En los frenos contamos con los magnificos Shimano XTR de 4 pistones.

De las ruedas, como es normal se encarga Oquo, con las Mountain Control MC32LTD, con llanta de carbono y 32mm de ancho interno, aunque también, gracias al programa MyO, podemos optar si queremos por llantas de aluminio.

Los neumáticos son Maxxis Assegai de 2,5” de anchura delante y Minion DHR2 de 2,4” el trasero. También podemos elegir entre diferentes carcasas más o menos reforzadas. Nuestra bici de pruebas montaba carcasa EXO+ delante y DoubleDown detrás.

En el resto de componentes predomina la marca de la casa OC, destacando un manillar de carbono MC10 carbon en el que también podemos elegir el rise deseado entre 20 o 35mm.

La tija de nuestra bici era una Fox Transfer Factory Kashima con 200mm de recorrido para nuestra talla M, aunque también se puede optar por una OC MC21.

La batería de nuestra unidad de pruebas era la de 630Wh, aunque se trata de la opción alternativa, ya que en principio viene montada con la de 420Wh.

La bici viene sin display, ya que con la App de Orbea para el GPS podemos visualizar los datos referentes a motor y batería en el mismo, y así tener un cockpit despejado, tal como el de una bici no eléctrica. Aunque si se prefiere, se ofrece un display Shimano EN600 que se ancla en la ranura de la tapa de la potencia y queda perfectamente integrado.

Toma de contacto con la Rise LT

Eran dos jornadas las que teníamos de pruebas y en Orbea hicieron todo lo posible por que pudiéramos aprovechar el tiempo al máximo, así que tal como terminaron la presentación de la nueva gama y nos contaron los detalles de la nueva Rise, nos dispusimos a realizar los ajustes necesarios para salir a montar. 

Nuestra bici de pruebas, como hemos avanzado, era la Rise LT M-TEAM, pero con algunos cambios respecto al montaje de gama, como la elección de cubierta trasera más reforzada o la batería de 630Wh. También usamos la mayor parte del tiempo el amortiguador de aire.

Con esta configuración nuestra bici arrojó un peso en báscula de 19,68 kg, lo cual nos pareció un gran punto de partida, pero cuando más tarde pudimos comprobar las capacidades reales de la Rise, el peso de la bici nos pareció sencillamente espectacular.

Tal como iniciamos la primera ruta no hubo mucho respiro para habituarnos a los mandos y, enseguida, nos encontramos subiendo por terrenos bastante técnicos. La gente de Orbea tenía ganas de mostrarnos las capacidades de la Rise en este tipo de terreno exigente y la verdad es que nos sorprendió desde la primera subida.

La Rise no es una eBike que lo vaya a hacer todo por ti. El que quiera subir sin hacer casi ningún esfuerzo y que el motor haga todo el trabajo tendrá que buscar otra opción, ya que la Rise es para aquel biker que disfruta de todas las vertientes de este deporte y el esfuerzo físico ocupa un lugar esencial en el MTB. Lo que sí hace la Orbea Rise es maximizar la diversión y hacer que una subida a priori imposible o de dureza extrema, sea un reto que podamos afrontar con un nivel de esfuerzo asequible.

En el transcurso de la primera mañana fuimos afrontando subidas cada vez más complicadas y pudimos comprobar como la asistencia del motor Shimano EP-801 RS Gen2 es, probablemente, la más natural que hemos probado. No se percibe retardo alguno en la entrega de la potencia y en zonas accidentadas, donde hay constantes cambios de impulso sobre los pedales, el motor se adapta de manera inmediata a lo que hacemos con nuestro propio pedaleo, ofreciéndonos una sensibilidad respecto a la tracción de la rueda trasera que nos permite adaptarnos perfectamente a lo que pide el terreno y superar los retos más difíciles con una suficiencia que nos dejó bastante sorprendidos.

Con el nuevo perfil de ajuste RS+ el motor nos aporta hasta 85Nm, y la verdad es que pudimos ponerlo a prueba ya que nos encontramos, durante los días que disfrutamos de la Rise, con algunas rampas realmente retadoras y las pudimos subir, incluso a veces, sorprendiéndonos nosotros mismos, ya que la potencia del motor va unida a ese “tacto” que hemos mencionado antes y nos permite maximizar la tracción para no perder el impulso en las zonas más comprometidas.

Cuando llegó el momento de bajar la Rise nos empezó a enseñar todas sus virtudes. Es esperable que una bici con las mejores suspensiones de Fox para Trail agresivo o Enduro y una geometría tan actualizada se desenvuelva bien en las bajadas, pero la Rise LT ofrece un comportamiento realmente notable. A lo antes mencionado hay que sumar un peso muy contenido para ser una eléctrica y que, además, está concentrado en la parte baja de la bici, dotando a la Rise de una estabilidad muy grande. 

Pero ya metidos en materia, bajando con velocidad por senderos accidentados e improvisando constantemente, ya que era la primera vez que bajábamos cada sendero de la zona, la Rise LT nos ofreció un control y confianza muy grandes. En esto tiene que ver muchísimo el equilibrio conseguido en la rigidez general de la bici.

La Orbea Rise LT nos aporta ventajas alternativas

A las grandes capacidades de la Rise LT hay que sumar algunos detalles que marcan aún más la diferencia.

Uno de estos detalles es un chip de cambio de geometría con el funcionamiento más rápido y fácil que hemos probado. Este tipo de soluciones es cada vez más común, pero suele ser necesario sacar un tornillo por completo e incluso liberar uno de los anclajes del amortiguador. Pues en la Orbea Rise LT basta con aflojar ligeramente el anclaje del amortiguador con el extensor, y el chip gira solo según levantemos o soltemos la bici. Volvemos a fijarlo y listo. Además se puede hacer con la llave que viene integrada en la palanca del eje trasero, con lo cual el proceso nos roba solo unos pocos segundos.

El hecho de que sea tan fácil lo convierte en algo que vamos a usar con cierta frecuencia ya que merece la pena afrontar esas subidas tan técnicas con el pedalier algo más elevado y un poco más de chispa en los movimientos de la bici. Y en las bajadas contamos con el aplomo y estabilidad de una geometría muy bajadora.

La verdad es que lo usamos bastante y notamos claramente el cambio de comportamiento, lo cual es un verdadero plus para la Rise LT.2

Y siguiendo con ciertos detalles que nos facilitan las cosas o, directamente, nos pueden hacer más rápidos, tenemos que hablar de la tecnología Free Shift de la transmisión Shimano XT Di2. Gracias a esto podemos cambiar de marcha en las bajadas sin necesidad de pedalear. Esto nos permite anticiparnos a esa zona de pedaleo que podemos encontrar en mitad de un descenso sin tener que perder nuestra posición de control durante la bajada. Ya sea una subida repentina o un llano donde podamos apretar, podemos tener siempre la velocidad correcta engranada.

Es cierto que requiere de práctica y automatizar ciertos gestos nuevos, pero al final de nuestras pruebas con la Rise ya estuvimos sacándole partido a esta ayuda, así que con tiempo no dudamos en que se puede convertir en algo casi imprescindible para el que lo haya probado.

Con la Orbea Rise 2025 la autonomía no es una preocupación

Con la gestión de batería que tiene el firmware RS Gen2 de Orbea no es necesario una batería de gran capacidad para tener mucha autonomía.

Gracias a la App de Orbea para nuestro Garmin, además de disponer de los datos de motor y batería en la pantalla, pudimos revisar los datos de las rutas en Garmin Connect y ver todos los parámetros.

En nuestro caso, con 75 kilos, y por los terrenos realmente accidentados que nos tenían preparados y, además, abusando casi constantemente del modo de máxima asistencia, ya que el ritmo que fuimos llevando fue muy alto, los datos fueron estos:

El primer día rodamos 39km con 1400m de desnivel positivo y usamos el 73% de la batería. El segundo día 42km y 1150m de desnivel y usamos el 69%.

Como ya hemos dicho, nuestra bici iba equipada con batería de 630Wh, pero vistos estos datos bien podríamos haber ido con la de 420Wh.

Conclusiones finales

Han sido dos jornadas intensas con doble sesión cada una de ellas pero nos hemos quedado con ganas de más. Durante la primera mañana fuimos dando con nuestros ajustes personales y a partir de ahí, hemos disfrutado de una bici realmente espectacular en unos senderos que tenían absolutamente de todo.

La Orbea Rise es una eléctrica que no “contamina” las sensaciones auténticas que ofrece una MTB. Un pedaleo natural con un plus de energía que nos permite alargar de manera épica nuestras jornadas de diversión y, al mismo tiempo, unas capacidades y manejo que nos hacen afrontar las bajadas más agresivas con la confianza de saber que el límite de la Rise está bastante lejos.

Orbea Rise 2025 LT M-TEAM: especificaciones y precio

• Cuadro: Orbea Rise OMR 2025, 150mm
• Horquilla: Fox 36 Float Factory Kashima 160mm, GripX
• Amortiguador: Fox DHX Factory 2-Pos 210x55 (opciones en MyO)
• Bielas: Shimano Steps EM900
• Manillar: OC Mountain Control MC10 Carbon, rise 20 (rise 35 en MyO)
• Potencia: OC Mountain Control MC11 All SL
• Pulsador: Shimano M8150
• Cambio: Shimano XT Di2 M8150 12s
• Cadena: Shimano CN-9100
• Frenos: Shimano XTR M9120
• Ruedas: Oquo Mountain Control MC32LTD (MC32TEAM en MyO)
• Cassette: Shimano XTR M9100 10-51
• Neumático Del: Maxxis Assegai 2,50” EXO+ / TR MaxxGrip (opciones en MyO)
• Neumático Tras: Maxxis Minion DHR2 2.40” EXO+ / 3C MaxxTerra (opciones en MyO)
• Tija: Fox Transfer Factory Kashima 31,6 (opciones en MyO)
• Sillín: Fizik Terra Ridon X1
• Motor: Shimano EP801-RS GEN2 eMTB optimized
• Bateria: Orbea Internal 420Wh (opción 630Wh en MyO)
• Precio: 10.999€