Qué relación vatio/kilo hay que tener para intentar ganar un Tour
Vencer un Tour de Francia es algo sólo al alcance de muy pocos privilegiados que aúna una mentalidad ganadora, solidez metal y capacidades físicas portentosas. El uso de los medidores de potencia ha servido para explicar en números lo que debe tener un ciclista para ganar el premio más preciado del ciclismo: el maillot amarillo del Tour de Francia.
Qué números necesitas para ganar un Tour de Francia
En el Tour de Francia 2023, durante la primera etapa de los Pirineos, Col de Marie Blanque, uno de los puertos más duros de esta cordillera con 9 kilómetros de longitud de dureza creciente hasta llegar a los 4 últimos, infernales en donde la pendiente se sitúa constantemente en un 11-13%, Jonas Vingegaard lanzó un terrible ataque que culminó el alto ritmo de sus compañeros en los kilómetros precedentes. Su principal rival, Tadej Pogacar, ni siquiera hizo el mínimo amago de salir a su rueda dada la violencia del cambio de ritmo.
El análisis posterior de la etapa nos dejó un dato tremendo. El danés tardó poco más de 12 minutos en completar los 4 kilómetros finales lo que supone, con esas pendientes, una velocidad de más de 2000 m ascendidos por hora. Metido todo en la calculadora, ya que los profesionales de primer nivel suelen guardar celosamente sus datos de potencia, supone mantener durante ese tiempo más de 7 W/kg de potencia, o lo que es lo mismo, para los 60 kg que figuran en la ficha del ciclista de Jumbo-Visma, más de 420 W. Lo que un cicloturista medio apenas puede mantener durante medio minuto, un minuto quizás si está entrenado, aunque habitualmente con más peso.
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Al día siguiente la historia se repetía en el Col du Tourmalet, quizás el puerto más legendario del Tour de Francia donde Tadej Pogacar y Jonas Vingegaard destrozaban el récord de la subida, que databa de hace 30 años a manos de Tony Rominger y Zenon Jaskula, merced al intensísimo ritmo de Jumbo-Visma desde el arranque y el postrero ataque de Vingegaard en la parte final tratando de descolgar al esloveno. En esta ocasión, un puerto mucho más largo. 16,8 km que ascendieron en 45 minutos y 37 segundos. En los 4 últimos kilómetros, donde se produjo la ofensiva de Jumbo-Visma, desarrollando en torno a 6,8 W/kg durante unos 13 minutos, que en esta ocasión, sí fue capaz de soportar el ciclista de UAE Team Emirates.
Unos números que a la mayoría de la afición no le dice nada, a los usuarios de medidores de potencia les sonarán aunque es posible que no alcancen a cuantificarlos plenamente y que resultan impresionantes.
En el libro “Entrenar y correr con medidor de potencia”, la biblia del entrenamiento por potencia y que estableció las bases para sacar todo el rendimiento a estos dispositivos y de la metodología para su uso, los doctores Hunter Allen y Andy Coggan definían las diferentes zonas de entrenamiento del ciclista en base al Umbral Funcional de Potencia o FTP en sus siglas en inglés. Un valor que se define como la mayor potencia que es capaz de sostener un ciclista de forma constante durante un esfuerzo de 1 hora de duración.
Evidentemente, la forma de averiguar este valor sería realizar un test de 1 hora de duración exprimiéndose a tope, algo excesivamente duro incluso para los profesionales. Por ello, encontraron una correlación entre un test de menor duración, en este caso 20’ y el valor que se podría mantener durante esa hora a tope. Un valor que variaría entre el 90 y el 95% del alcanzado durante 20 minutos, siempre dependiendo del perfil del ciclista, más diésel o más explosivo.
El valor de FTP, así como el de otras duraciones como 5 segundos, 1 minuto, 5 minutos y 20 minutos es lo que permite determinar el perfil del ciclista con las que los autores crearon unas tablas que permitían determinar el nivel de forma cada uno de un simple vistazo.
En la parte alta de la tabla vemos que, para ser ciclista profesional un FTP de más de 6 W/kg es prácticamente obligado hoy en día. Sin embargo, ¿qué hay de ganar el Tour de Francia? Pues con los datos de los últimos años, siempre basados en estimaciones ya que, como decíamos antes, los ciclistas de primer nivel mantienen sus datos de potencia en el más estricto secreto para no dar pistas a sus rivales, es necesario contar con un FTP de más de 6,6 W/kg. Esto significa generar más de 7 W/kg en el famoso test de 20 minutos.
Sin embargo, parece que tanto Tadej Pogacar como Jonas Vingegaard han conseguido llevar estas cifras un poco más lejos. Hay que tener en cuenta que cuando se hace un test se afronta completamente descansado y sólo se va a hacer eso, al máximo. Si el test está bien hecho, tras el mismo no resta sino arrastrarse pedaleando a ritmo cansino hasta casa ya que nos habremos vaciado por completo. El propio Alberto Contador nos hablaba de todo esto en un vídeo publicado hace algún tiempo en su canal de YouTube.
A las tremendas cifras que consiguen mover hay que añadirle la extraordinaria capacidad de recuperación para poder seguir manteniendo ese nivel con el paso de los días aunque, obviamente, la fatiga acumulada durante la carrera va a hacer que estas cifras estratosféricas vayan disminuyendo según avance el Tour de Francia. Como se suele decir, el Tour es una carrera de resistencia y ser el ciclista al que menos le afecte la fatiga, es decir, cuyos números se resientan menos es lo que suele acabar inclinando la balanza en favor de uno u otro.