Hatherly se lleva la victoria en Banyoles tras ganar un duelo final a seis
Hatherly se lleva la victoria en Banyoles tras decidir la carrera en la última vuelta con un movimiento que dejó atrás a los otros cinco corredores que formaban el grupo de cabeza. Schwarzbauer llegó segundo y Carod fue tercero. Valero tuvo que conformarse con la quinta posición después de estar al frente durante buena parte de la prueba.
Hatherly gana la Shimano Super Cup Massi de Banyoles con un ataque en los compases finales que nadie pudo replicar
Los corredores se encontraron un circuito más seco del que se había vivido en la prueba femenina y la salida se produjo sin incidentes. Hatherly se hizo con la primera posición seguido de Carod, que se pegó a su rueda para cerrar junto a él la start lap con un mínimo hueco de 3 segundos.
La primera vuelta empezó con los dos líderes apretando, mientras un numeroso grupo plagado de estrellas -entre los que se encontraban Valero y Campos- venía por detrás. Solo hicieron falta unos pocos metros para que dieran caza a la cabeza y formar así un enorme grupo al frente de la prueba.
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Hatherly aguantó primero y Valero se situó segundo. El grupo se estiró aunque sin soltar a nadie; Carod, Sarrou y Dascalu iban tras el campeón español.
Los tres primeros abrieron una pequeña brecha con los demás, pese a que todos eran conscientes de que la primera vuelta tenía que servir para tomar nota mental y aprender de cómo estaba el terreno después de la copiosa lluvia que había caído durante la noche.
Acabó la primera vuelta y Hatherly cambió el ritmo. Pese a que abrió un pequeño hueco, Valero y Carod tiraron de cuádriceps y lo cerraron. Por detrás, el grupo perseguidor, cerrado por Cullell, también reducía diferencias.
Aun así, los tres primeros siguieron escapados mientras los inmediatos perseguidores quedaban reducidos a un grupo de ocho que tenía 16 segundos de desventaja.
Valero asumió la primera posición, Hatherly se enganchó a su rueda y aunque Carod cedió unos metros, volvió a recuperarlos en la parte final de la vuelta. El trío pasó de nuevo por meta y el grupo perseguidor hizo lo propio 25 segundos después.
El corredor del BH Coloma Team llevó el peso del liderato sin fisuras, mientras el margen en cabeza se ampliaba poco a poco.
Pese a esto, el grupo perseguidor, que se había reducido a siete corredores, consiguió reducir la diferencia: pararon la sangría en los 30 segundos y los recortaron hasta quedarse a 13 segundos al inicio de la tercera vuelta.
Hatherly volvió otra vez a ser primero. Froidmont comandaba el grupo perseguidor y se erigía como el principal responsable del acercamiento a la cabeza. Sarrou no pudo seguir el ritmo del belga y el grupo perseguidor quedó formado solo por cuatro corredores, Froidmont-Schwarzbauer-Schneller-Fluckiger.
Valero sufrió para seguir a Hathery y Carod, aunque poco después volvió a situarse junto a ellos para recomponer el trío que había dominado la prueba desde el principio.
Nuevo paso por meta. Sin cambios arriba de la tabla y con los perseguidores a 27 segundos. Otra vez Valero delante. El de Baza apretó cuando el terreno picó hacia arriba. Hatherly resisitó pero Carod cedió unos metros y perdió 4 segundos.
Por detrás, Fluckiger movió ficha para tratar de escapar y amarrar la cuarta posición en un momento en el que los perseguidores ya solo eran tres, el suizo y Schwarzbauer y Froidmont.
Fluckiger sacó fuerzas para reducir diferencias con los tres de delante e incluso tuvo energía suficiente para cerrar el hueco y ponerse a rueda de los líderes.
Última vuelta. El recién formado cuarteto se convirtió en un grupo de seis cuando Schwarzbauer y Froidmont también llegaron. Arrancaron la vuelta juntos. Era cuestión de tiempo que alguien atacase.
Valero imprimió un ritmo alto y machacón que obligó a que todos hicieran un esfuerzo extra, aunque por el momento nadie se descolgaba. El español siguió insistiendo mientras encaraban la segunda parte de la vuelta.
Y en ese momento Schwarzbauer cambió el ritmo con un ataque que replicó Hatherly. El sudafricano se puso primero y Valero se quedó en tercera posición. Gran movimiento de Hatherly que abrió un hueco de algunos segundos con el alemán, mientras el resto ya perdía una ventaja vital para la victoria.
6 segundos entre Hatherly y Schwarzbauer; los demás, a más de 10. Nadie pudo parar al sudafricano y Hatherly llegó a meta primero para alzar los brazos al cielo de Banyoles. Schwarzbauer lo hizo en segunda posición y Carod completó el podio.
Froindmont fue cuarto y Valero tuvo que conformarse con ser quinto, a 18 segundos del ganador.