El ajuste biomecánico de tu bici no es para toda la vida: razones para actualizarlo

Si no recuerdas el último ajuste biomecánico que hiciste a tu bicicleta, o si sencillamente te acabas de quedar de una pieza porque jamás te has hecho un ajuste biomecánico, ya te lo adelantamos: es como ir al dentista o pasar la ITV al coche, hay que hacerlo con periodicidad. Te contamos por qué.

El ajuste biomecánico: fundamental hacerlo periódicamente

Ajustar tu bicicleta con un buen ajuste biomecánico es fundamental. Hará que mejore tu rendimiento y del mismo modo evitarás caer en lesiones o en usos nocivos también para tu bici o mountain bike. Estos ajustes biomecánicos o estudios biomecánicos suponen un análisis en profundidad para que tu bicicleta quede perfectamente ajustada a ti.

El ajuste biomecánico ha de ser evolutivo, esto significa que no basta con hacerlo una vez, sobre todo la primera cuando compras tu bici o mountain bike nueva, y olvidarlo de por vida. Porque la misión de un buen ajuste biomecánico es que tu bicicleta se adapte a ti, y lo que ocurre recurrentemente es que los ciclistas se adaptan a la bicicleta sin apenas darse cuenta.

Hoy te aportamos multitud de rezones por las que es fundamental hacer un ajuste biomecánico con cierta recurrencia.

Razones para realizar un ajuste biomecánico

Por un desajuste de tu bici o mountain bike

En primer lugar, porque una bici o mountain bike no es un hierro fijo. Está compuesta de multitud de partes móviles que, por muy bien ajustadas que estén, pueden sufrir desajustes con el paso del tiempo. Estos leves cambios, imperceptibles en el momento de producirse por ser mínimos, hacen que poco a poco te vayas adaptando a la bici sin percibirlo. Esto, acumulado en el tiempo, hace que necesites ese ajuste biomecánico con urgencia.

Por un cambio físico del ciclista

Pero además, no sólo tu bici es alterable, sino que tú también cambias con el tiempo. Sí, seguro que lo sabes, pero igual no caes en la cuenta de cuánto ni cómo. Un ser humano, con los años, experimenta cambios físicos. Menos elasticidad, reducción de las partes tendinosas o cartilaginosas, reducción o menos flexibilidad de la masa muscular. Son algunos ejemplos que hacen que un ajuste biomecánico sirva para corregir estos pequeños cambios fisiológicos.

Por modificaciones posturales

A esos, también hay que añadirle cambios posturales. Es decir, con el tiempo es más complicado y menos aconsejable adoptar ciertas posturas sobre la bicicleta o mountain bike. Cuando uno es joven, todo está permitido, pero con la edad no se está para los mismos malabarismos.

Por un cambio en tus objetivos

A estas razones más lógicas hay que añadir otras. Como por ejemplo, el cambio de objetivos de un ciclista. Puede ser para crecer en cuanto a los retos, o para ir reduciéndolos, que es lo más normal y lógico. Ante esta circunstancia, un ciclista debería hacer una ajuste biomecánico que reconfigure de nuevo su bicicleta a las nuevas circunstancias.

En esta búsqueda de mayor o menor rendimiento hay tres aspectos que un ajuste biomecánico aporta de manera brillante. Aerodinámica, comodidad pero también potencia. Puedes configurar una bicicleta para que sea más aerodinámica o para que sea más cómoda; para que mejore tu implementación de potencia o tu agilidad en la cadencia.

Porque has sufrido un accidente

Pero hay otras circunstancias que pasan más desapercibidas pero son reales. Por ejemplo, muchos talleres realizan un ajuste biomecánico a ciclistas que han sufrido un accidente. Así es, configuran la bicicleta o mountain bike para personas que están en fases de recuperación, de forma que ayude en esta rehabilitación de forma poco agresiva.

Porque has creado nueva vida

Una más: un parto. Claro, porque a menudo no pensamos en esta circunstancia tan particular que experimenta una mujer, y el mundo, por supuesto, no es meramente masculino. Tras dar a luz, una mujer ciclista a menudo necesita ciertos ajustes mientras su cuerpo vuelve a recomponerse. Muchos estudios afirman que esto puede llevar incluso un período de un año, así que es fundamental un ajuste biomecánico para reconfigurar la bici.

Por un cambio de peso

Las razones de peso son otro gran argumento. Muchas personas cambian de peso. Mayoritariamente ganan peso, lo que conlleva un nuevo cambio en los balances y equilibrios de la bicicleta o mountain bike, algo que un ajuste biomecánico acaba por arreglar.

Estos son algunos de los casos o algunas de las razones que exigen un ajuste biomecánico. En cualquier caso, siempre es conveniente tener una cierta periodicidad en él. Lo óptimo, un año. Lo mínimo, cada dos años. Lo perfecto, cada vez que creas que hay algún cambio importante de corregir.