Contador sobre su rivalidad con Armstrong: "Si tú quieres respeto, eres el primero que tienes que darlo"
Recientemente, el ciclista de Pinto habló sobre su relación con Lance Armstrong en un momento distinto para ambos: Armstrong venía de ganar 7 Tour de Francia, de hecho había hecho un amago de retiro para luego volver a Astana; y dio la casualidad de que en Astana ya había despuntado un Alberto Contador con un Tour (el de 2007), un Giro y una Vuelta a España (los de 2008).
El enfrentamiento entre Alberto Contador y Lance Armstrong
Coincidieron en 2009 y, como era de esperar, surgió la tensión ante el objetivo compartido de ganar el Tour de Francia de ese año.
Una gran polémica envolvió el arranque de aquella edición de la ronda gala. Los focos estaban puestos en Alberto Contador y Lance Armstrong. Como decimos, el primero regresaba después de una sanción, el segundo después de dar un paso al lado y regresar. Contador, que hace unos días sorteaba su bicicleta de 2011 para ayudar en esta pandemia actual, habló sobre aquellos duros años.
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De hecho, en la entrevista con el youtuber Valentí Sanjuan, Contador narra cómo empezó todo, cuando ante tal magnitud de los nervios y la tensión decidió ir a hablar directamente con Lance Armstrong. El norteamericano le dijo: “para mí es mejor que ganes tú el Tour”, y menos de 24 horas después avisó de que iba a salir a morder en la primera crono escribiendo en Twitter “mañana en la contrarreloj veremos quién es el líder”.
A partir de ahí, todo conflictos. Tres etapas más tarde, un abanico corta a Alberto Contador y su equipo tira con Armstrong a la cabeza, dejando a su supuesto líder a su propia supervivencia. Alberto sobrevivió, y con el cuchillo entre los dientes esperó a los Pirineos. En la primera etapa pirenaica las órdenes eran no atacar, algo que para Alberto Contador era incomprensible dada su gran faceta en la montaña. “Consulté a un compañero neutral”, dice, y atacó. Ganó la etapa y recuperó todo el tiempo perdido y un poco más.
Aquello acabó por detonar toda la tensión acumulada durante meses, y en la reunión postetapa el día siguiente ambos tomaron la palabra. Armstrong afirmó que Contador no había cumplido las órdenes de equipo ni respetado la táctica; Alberto Contador le respondió: “Si tú quieres respeto, eres el primero que tienes que darlo. Me lo has faltado a mí desde el principio de año como a todo el equipo”. En ese momento, Armstrong intentó ironizar con un “OK, Pistolero”, pero al bajar del autobús se acercó y en tono bajo dijo las palabras que ya se han hecho famosas en dicha entrevista al ciclista madrileño: “No me jodas”, espetó Armstrong a un Contador que no se amilanó.
El final del conflicto en 2009 entre Contador y Armstrong
Pero la cosa no quedó ahí. De hecho, ya había empezado antes, cuando contador afirma que dejaron en tierra a su persona de confianza dentro del equipo, Benjamin Noval, algo que intentó pasar por alto para centrarse en el objetivo de ganar, pero que más tarde analizó como una campaña de desestabilización ya previa al Tour de Francia 2009.
La otra gran anécdota que cuenta Contador es cuando tuvo que comprar una rueda lenticular de última geneación a otro equipo del pelotón. Con dinero de su bolsillo, sí, porque las dos disponibles en el equipo se las montaron a Armstrong. Fue otro acto de rebeldía de Contador que tampoco sentó nada bien ni al propio Armstrong ni al Astana.
Pero de todo esto ya saben cómo acaba la historia: Alberto Contador se acabó llevando aquel Tour de Francia 2009; y años después, Lance Armstrong era desposeído de sus siete victorias en el Tour. Justicia poética para algunos.
Los medios de comunicación del momento ya se hacían eco de algunos roces, algunas tensiones que oficialmente siempre eran suavizadas. Seguro que les suena esa historia: dos gallos y un gallinero.
Es, de hecho, la historia interminable que ha tenido su capítulo más reciente con la nueva versión del pasado liderazgo de Movistar, en su caso con tres ciclistas como Valverde, Landa y Quintana. Al igual que el equipo español intentaba transmitir una imagen de unidad, objetivo común y nuevo modelo de equipo, el Astana de la época también hablaba de otorgar a ambos ciclistas las mismas condiciones, sin un liderazgo claro para el que el equipo tuviera que remar. Y, ante esa actitud dubitativa, Armstrong se mostró inflexible y duro con Contador.
Ahora, la vida de Alberto Contador es mucho más tranquila. Incluso ya no sale a dar pedales cuando llueve, afirmaba recientemente. La entrevista completa, la puedes ver a continuación.