El símbolo del diamante marca el nuevo futuro de Öhlins

La histórica firma sueca de suspensiones Öhlins ha presentado su nueva identidad visual, un cambio que simboliza el comienzo de una nueva era dentro del grupo Brembo y que refleja una estrategia más tecnológica y orientada al usuario.

Öhlins estrena nueva imagen para una nueva etapa

La presentación tuvo lugar este 3 de noviembre en Upplands Väsby (Suecia) y supone mucho más que un simple rediseño del logotipo: es la confirmación de la transformación que vive la marca desde su adquisición por parte de Brembo a comienzos de 2025. Con esta operación, el grupo italiano, líder mundial en sistemas de freno, integró a Öhlins en su estrategia de ofrecer soluciones inteligentes y conectadas para el alto rendimiento en motocicletas, automóviles y bicicletas.

El nuevo logotipo mantiene la esencia de la tipografía clásica de Öhlins, pero se moderniza con líneas más limpias y un diseño digitalmente optimizado que refleja la sobriedad escandinava. El icónico color amarillo sigue siendo protagonista, acompañado ahora por tonos negros, blancos, azules y grises. Además, la marca incorpora un nuevo símbolo, reinterpretación de la letra “Ö”, formada por dos flechas que convergen en un diamante y que representan expansión, innovación y precisión, valores que han guiado a Öhlins durante medio siglo.

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Bajo la nueva dirección, Öhlins busca consolidar una estrategia centrada en la innovación tecnológica y la transferencia directa de desarrollos de competición al mercado. Un punto especialmente relevante para el sector del mountain bike, donde la marca había mantenido una presencia destacada en equipos de Copa del Mundo XCO, como BMC, pero sin trasladar algunos de sus avances, como las suspensiones electrónicas vistas en competición, al catálogo comercial.

La entrada en el grupo Brembo ha traído consigo el compromiso de revertir esa tendencia y hacer que los prototipos desarrollados en competición lleguen de forma más rápida al usuario final, algo que hasta ahora había sido una asignatura pendiente. Este cambio de imagen puede entenderse, por tanto, como un paso más en esa dirección y un anticipo de lo que podría empezar a materializarse durante 2026.

El CEO de Brembo, Daniele Schillaci, destacó que este cambio de imagen “marca un hito importante para el futuro de Öhlins y refuerza la alineación de ambas marcas dentro de una estrategia común centrada en ofrecer soluciones inteligentes e integradas a nuestros clientes”.

La nueva identidad se presentará oficialmente al público durante el EICMA 2025, la feria internacional de la moto que se celebra en Milán. Además, el próximo año será importante para la historia de la marca, ya que Öhlins celebrará en 2026 su 50 aniversario. Cinco décadas que han sido sinónimo de excelencia en competición y referencia en suspensión de alto rendimiento.