Pinarello Grevil+ reinventa el gravel

El gravel es una especialidad al alza, sin duda. Cada año decenas de marcas debutan en esta disciplina que crece y prevé mayor aumento de público por la versatilidad de estas bicicletas. Pero aún quedaban algunas por sorprendernos, entre ellas Pinarello. MMR o Canyon ya tenían sus modelos gravel; la mítica marca italiana ha tardado un poco más, pero la espera ha merecido la pena, sin duda: analizamos la nueva PInarello Grevil+

El debut en gravel: Pinarello Grevil y Grevil+

El fabricante italiano ya debía tener preparado su salto al gravel, porque viendo el resultado final de la Pinarello Grevil+ nos damos cuenta que no es fruto de una ocurrencia. Los de Treviso han conseguido mantener sus famosas líneas italianas en el nuevo cuadro, un cuadro además fabricado en la famosa y patentada fibra de carbono Torayca de Pinarello, una fibra T1100 Carbon 1K que ellos mismos denominan “Dream Carbon” y que incorpora todos sus avances en nanotecnología basados en combinar múltiples polímeros a pequeñísima escala.

Con este carbono de altísima calidad fabricarán la Pinarello Grevil+, mientras que aprovechan el tirón del gravel para presentar también un modelo prácticamente calcado, pero con T700 para abaratar su coste y hacerla más accesible al público general.

Esta nueva Pinarello Grevil+ es una gran alternativa al modelo que reemplaza, la GAN GR-S, y supone un salto y una apuesta importantes por el gravel y las disciplinas offroad en cuadros de carretera, algo que no es una sorpresa ya que fue presentada junto a la Crossista+, la bicicleta de ciclocross de Pinarello.

Componentes de la Pinarello Grevil+

Qué decir del cuadro de esta Grevil+: identidad pura Pinarello, con su característica forma aerodinámica de la horquilla, que se mantiene aquí, y el pellizco en la mitad del tubo diagonal, aspectos que ya aparecían en los cuadros de carretera de Pinarello. Un par de matices nuevos, sobre todo en la unión del sillín, el tubo de sillín y la barra horizontal, donde se nota el trabajo de la marca italiana para fortalecer esta zona respetando siempre y en todo momento las formas que han forjado su carácter históricamente. En esta parte, tubos de perfil aplanado, y nervios totalmente orgánicos y embutidos, ni un puto de sutura apreciable. Tampoco en el pequeño grado que ganará la posición del ciclista gracias a una pequeña curva junto al eje de pedalier. Un acabado magnífico.

Ya está diseñada pensando en el gravel moderno, y admite llantas de 42mm en ruedas 700c, así como de 2.1” si se tratan de ruedas 650b. Dejan de lado los 29” en favor de la manejabilidad que restarían cadenas tan largas para mover esas ruedas.

Puede montar monoplato o directamente cambios delantero y trasero, por supuesto con todo el cableado embutido, y se pone a la venta en cinco combinaciones de color diferentes.

Otro punto que desprende cuidado al detalle es el final de la horquilla, en el que se ha creado en la misma pieza del cuadro un protector de la pinza de freno delantera. Una forma aplanada que, una vez más, cumple esta función con la puramente aerodinámica. Pinarello comenzó haciendo bicis aero, y ese espíritu sigue presente. A pesar de ser el gravel una disciplina donde la aerodinámica quizá no se considere, Pinarello no olvida que las mejoras sutiles son grandes cuando se pasan horas sobre cualquier bici y rodando por cualquier superficie.

Sí que no incorpora el novedoso sistema de suspensión con elastómero que desarrollaron de la mano de HiRide y que sí monta la Dogma K10S, pero tampoco se debería descartar que en un futuro próximo sí que lo monten en la Pinarello Grevil+. Lo que sí tiene es el diseño Asymmetric de cuadro propio de Pinarello

En seis tallas, desde los 44 a los 59cm, y disponible desde finales del próximo febrero de 2019, Pinarello no ha querido desvelar precios. Eso sí, afirman que la Pinarello Grevil va a suponer una propuesta muy agresiva en la relación calidad/precio con el objetivo de meterse de lleno en el sector.