Probamos las zapatillas Mavic Crossmax BOA: elegantes, cómodas y eficientes

Desde que vimos este modelo en el catálogo de Mavic estábamos deseando probarlo, a primera vista las Mavic Crossmax BOA destacan por su estética sobria y elegante pero además, son unas zapatillas de mountain bike muy cómodas y de alto rendimiento. Tienen todo lo que se le puede pedir a una zapatilla de cross country y pueden ser la opción perfecta para aquellos que están hartos de zapatillas estrechas.

Zapatillas Mavic Crossmax BOA, perfectas para pies anchos

Las Crossmax BOA son una de las últimas incorporaciones al catálogo de zapatillas de mountain bike de la casa francesa Mavic, se trata de un modelo muy equilibrado dirigido a la mayoría de ciclistas que buscan rendimiento, comodidad y seguridad.

Su línea estética podemos definirla como sencilla y elegante pero el logo sobredimensionado que recorre la zapatilla de un extremo hace de ellas unas zapatillas muy originales. Como siempre decimos, este aspecto es muy subjetivo pero a nosotros nos parece un gran acierto y pensamos que este modelo podría convertirse en objeto de deseo tanto para ciclistas de mountain bike como de gravel.

El empeine exterior está construido en un tejido sintético flexible con más de 100 microperforaciones láser distribuidas por toda la zapatilla, y la puntera está reforzada con un material gomoso que protege la zona más propensa a golpes y roces. Con esta solución se consigue un acabado resistente, transpirable y muy cómodo.

Del ajuste se encarga el BOA® Fit System L6, un solo dial en la parte exterior de cada zapatilla que permite un apriete milimétrico y una liberación instantánea a la hora de quitárnoslas. Pero es aquí, en el ajuste, donde el diseño de las Mavic Crossmax BOA y su puntera ancha cobra sentido. Por lo general la mayoría de zapatillas para mountain bike son estrechas y creemos que no tiene mucho sentido, pues hay muchos ciclistas con la horma del pie ancha y otros tantos que prefieren disponer de un poco más de espacio para que sus dedos de muevan cómodamente durante largas jornadas sobre la bici o cuando hay que andar con ellas algunos tramos del recorrido. Todos ellos seguro que agradecen que Mavic haya diseñado estas zapatillas con un poco de espacio extra en la zona de la puntera. Además, el interior resulta muy confortable gracias al material suave elegido, a la lengüeta 3D de EVA que abraza el pie de manera dócil y a su plantilla de alta calidad OrthoLite®.

Al tener un solo BOA nos hizo temer que el ajuste se podría ver perjudicado, pero el cierre tiene mucho recorrido y basta con ir moviendo un poco el pie mientras vamos apretando para que el pie quede perfectamente abrazado.

La rigidez de la suela es el factor clave y decisivo para la mayoría de ciclistas de mountain bike y en este apartado las Mavic Crossmax BOA incluyen una suela Energy Grip Terra con un índice de transmisión de energía 40. Es cierto que no se trata de una suela de carbono, pero no le hace falta. Las hemos probado durante varias semanas y en ninguna situación hemos notado que flaqueen en rigidez o transmisión de potencia, y sin embargo resultan muy cómodas a la hora de andar con ellas, bajar escaleras con la bici al hombro o hacerlo en tramos de senderos complicados en los que hay que subir por terreno roto y empujando la bici. El taqueado Contagrip® es generoso y aporta la seguridad y confianza necesaria cuando no vamos dando pedales.

Tras varias semanas de prueba, las Mavic Crossmax BOA se han acabado convirtiendo en las zapatillas más habituales de nuestras salidas, incluso por delante de algunas otras que las superan en rango de precio, y eso no es por casualidad. Realmente el espacio extra de la puntera es algo que marca la diferencia para los que tenemos el pie ancho y si su estética te cautiva no querrás ver otras en tus pies. 

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