5 problemas comunes que puedes tener con las ruedas tubeless

La mayoría de los bikers usan ya, a día de hoy, neumáticos sin cámara. Su entrada en el mercado fue meteórica, tanto que comod decimos el tubeless ha logrado dominar paulatinamente el mercado. ¿Sus ventajas? Entre otras reduce la probabilidad de pinchazos -ya sean provocados por espinas o por cualquier otra circunstancia-, es compatible con presiones mucho más bajas -una gran ventaja cuando se necesita un agarre mayor en determinados terrenos- y su a la hora de la reparación, su mecanismo es mucho más sencillo y rápido que el de las cámaras tradicionales.  

Pero, ¿tiene inconvenientes? Por supuesto. Los hay que se mantienen fieles al método más tradicional y tienen razones de peso para hacerlo. Hoy te traemos 5 de los problemas más comunes que puedes tener con las ruedas tubeless. 

5 problemas que puedes tener con las ruedas tubeless

Falta de sellador

Cada líquido sellante es un mundo, tiene sus propias indicaciones de uso -el tiempo que se necesita etc.- A más volumen y tamaño, más sellador necesitarás. Algunos cometen el error de no llenar todo el interior del neumático, y esto es un problema muy grave. Recuerda girar la rueda para que el producto se extienda correctamente. 

Enganchar en la llanta

Incluso si has adquirido llantas y cubiertas específicas para tubeless, puedes tener problemas al colocarlas. Un buen truco para solventar este problema es hacerse con algún lubricante -el agua con jabón vale- y aplicarlo en la base de la llanta. La mejor alternativa es rociar con un poco de esmalte de silicona: así no solo lograrás que la llanta se asiente a las mil maravillas, también evitarás que el barro se adhiera a las paredes laterales. 

Problemas con la cinta

Colocar mal la cinta es otro de los problemas más habituales entre los que apuestan por el tubeless. Para asegurarte de no caer en él, empieza limpiando la base de la llanta para asegurarte de que la cinta se adherirá bien. Comienza cerca de la válvula y hazlo con mimo hasta terminar. 

Cambio de líquido

Uno de los problemas más graves del tubeless es que su líquido debe ser cambiado cada dos meses aproximadamente, teniendo además un coste considerable. No serías el primero -ni el segundo- que se ve en la circunstancia de quedarse sin producto sellante en una circunstancia complicada. 

Mayor gasto

Como hemos dicho a lo largo del artículo, optar por el tubeless tiene ventajas e inconvenientes. El precio es uno de sus problemas más importantes: llantas más caras, cubiertas más caras, reposición constante de líquido...Es algo a valorar si te ves en la situación de elegir entre ambas opciones. 

Y tú, ¿eres de tubeless? ¿Te has encontrado con alguno de esos problemas? ¡Cuéntanos tu experiencia en nuestras redes sociales!