Vuelta al País Vasco: previa

Hoy, lunes 4 de abril, dará comienzo la edición número 56 de la Vuelta al País Vasco (Itzulia), que se alargará hasta el próximo sábado día 9. La carrera consta de 5 etapas en línea y una contrarreloj individual que cerrará esta edición de la prueba.

El recorrido sigue los patrones habituales de la prueba vasca. Los ciclistas se enfrentarán a cinco etapas quebradas con múltiples subidas cortas y explosivas en caminos estrechos, que en sus bajadas premiarán a los más hábiles sobre la bicicleta. Solo dos de ellas, la segunda en Amurrio y la quinta en el Alto de Usartza, finalizan en alto.

Esa quinta etapa, con la tradicional subida a Arrate, será la jornada reina de esta Itzulia 2016: los ciclistas afrontarán hasta siete subidas cortas y explosivas antes del reto final, los 8 kilómetros con rampas de hasta el 13% que ya son seña de identidad de esta prueba.

Se trata en definitiva de un trazado bonito, que dará juego y permitirá ver situaciones interesantes de carrera, pero que peca de poca variedad -las cinco etapas en linea son relativamente similares, especialmente las cuatro primeras- y de colocar la contrarreloj en el último día de la prueba, ya que el hacerlo antes podría obligar a los escaladores a ser más ofensivos.

En cuanto a la participación, la Itzulia disfrutará un año más de un cartel de auténtico lujo. Pese a ausencias destacadas como Alejandro Valverde, Vincenzo Nibali o Chris Froome, el potencial de los participantes es más que suficiente para dar un espectáculo a la altura de la cita.

Alberto Contador es el principal favorito a la victoria. Tras quedarse a las puertas en la Vuelta al Algarve, París-Niza y Volta a Catalunya, donde le superaron Geraint Thomas -en las dos primeras- y Nairo Quintana -en la ronda española-, buscará la victoria para no llegar al Tour de Francia, Dauphiné mediante, con su casillero de generales a cero. El recorrido sin duda le beneficia, por lo que el de Tinkoff está ante una gran oportunidad de lograr su cuarta victoria en la Itzulia.

Pese a que el recorrido está lejos de ser el ideal para el colombiano -su superioridad atlética aflora especialmente en la alta montaña-, Nairo Quintana no pude dejar de estar en el ramillete de principales candidatos a la victoria. El de Movistar demostró en Catalunya que ha llegado a Europa en un gran estado de forma, y a buen seguro que sus rivales sufrirán para sacarle de rueda. Además, la ausencia a última hora de los hermanos Izaguirre aquejados de una gastroenteritis garantiza que acude como único líder del equipo.

Uno de los hombres que está llamando la atención en este 2016 es Thibaut Pinot. Ganador en Critérium Internacional, cuarto en Algarve y quinto en una Tirreno Adriático que fue capada de las etapas más propicias para él, seguro que estará en la disputa. En su contra, las bajadas técnicas que deberá afrontar, en las que históricamente ha sufrido pese a su mejoría en ese terreno. A su favor la contrarreloj final, muy adecuada a sus condiciones, en la que podría superar al resto de favoritos.

El último de los cuatro grandes candidatos es Sergio Henao. Segundo en la edición de 2015, está temporada está mostrando grandes sensaciones. En París-Niza, subyugado a su líder Geraint Thomas, por momentos dio la sensación de ir más fuerte que él y finalizó en sexta posición. Sin su presencia ni la de Chris Froome, unido a que Mikel Landa, que participará en la prueba, no parece estar todavía para competir con los mejores, el colombiano debería ser el hombre fuerte de la escuadra británica.

El resto de hombres importantes, por unos motivos o por otros, no parecen estar al nivel de los otros cuatro citados. A Purito Rodríguez el recorrido le va como anillo al dedo, pero sus actuaciones esta temporada hacen pensar que su declive ha comenzado. Tampoco el italiano Fabio Aru, que este año irá al Tour de Francia como líder del conjunto Astana, da la sensación de haber alcanzado de momento el golpe de pedal que le permita hacer demostraciones como las de la pasada Vuelta a España.

La Itzulia se podrá seguir en directo por la cadena autónomica vasca, ETB, y en cuanto a la climatología hay previstas lluvias para varias de las etapas, lo que con seguridad hará del recorrido todavía más duro de lo que es.